E gremio de empresarios de Venezuela, Fedecámaras, organizó el martes su Asamblea Anual con una novedad particularmente notoria: la presencia de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, como invitada especial, y el desarrollo de una jornada en la cual abundaron las reflexiones sobre el reconocimiento mutuo y el trabajo en función de los intereses de la nación. Es la primera vez en 20 años que un alto representante del gobierno chavista participa del evento que reúne a los directivos de las principales empresas del país.
La presencia de Rodríguez en Fedecámaras —tildada por el chavismo de “burguesía parasitaria”— es resultado de un esfuerzo subrepticio de políticos y empresarios de ambos bandos para acercar posiciones y estructurar acuerdos mínimos, reconstruir el tejido económico nacional y consolidar la estabilidad del país. Esta iniciativa, en pleno desarrollo, tiene su correlato en el campo político.
En el campo oficialista, han estado particularmente activos en la empresa los hermanos Jorge y Delcy Rodríguez, y el vicepresidente para el Área Económica, Tareck El Aissami. Del lado de la disidencia, hay algunos partidos políticos, medios de comunicación y empresarios de larga tradición en el país, como Alberto Vollmer, presidente de Ron Santa Teresa, y Horacio Velutini, del Fondo de Valores Inmobiliarios.
“Este es el camino: la participación de los sectores económicos privados para desarrollar las altas potencialidades productivas que tiene Venezuela”, afirmó Rodríguez, quien centró la mayoría de sus comentarios en colocar a las sanciones internacionales contra el régimen de Nicolás Maduro como responsables del derrumbe de la nación.
“Es importante profundizar en cómo ha afectado al sector privado la aplicación de las sanciones”, subrayó Rodríguez. “En apenas cinco años, somos el sexto país con mayor cantidad de personas públicas, jurídicas y privadas sancionadas ilícitamente”, añadió la vicepresidenta. Lo afirmado no impidió a Rodríguez expresar que “los empresarios del mundo ven con envidia a los de Venezuela.”
Con información de El País