El mercado de valores presenta al ahorrista una oportunidad de ampliar su capacidad de ahorro en un entorno regulado: Con una cantidad de dinero relativamente baja, un inversionista puede financiar el crecimiento de las empresas venezolanas y participar de su rentabilidad.
Así lo afirmó el director ejecutivo de Invercapital, casa de bolsa, Luis Gerardo García, en entrevista exclusiva para El Universal, donde aclaró que no se necesitan grandes sumas de dinero para incursionar en este mercado, hasta el pequeño ahorrista puede participar de acuerdo con sus capacidades.
García explicó que históricamente las personas que han invertido en el mercado de valores venezolano han visto cómo sus inversiones han sido protegidas contra la inflación, es decir, una protección patrimonial importante mucho mejor que otros instrumentos asociados al ahorro.
Beneficios de invertir en la bolsa
El ejecutivo de casa de bolsa indicó que invertir tiene como beneficio que se hace bajo un marco regulatorio que siempre en estas circunstancias es muy valioso, el mercado de valores cuenta con una regulación y supervisión de la Superintendencia Nacional de Valores (SNV), que al inversionista le da una instancia de protección y seguridad de mucho valor.
“Para que una empresa pueda entrar al mercado de valores, tiene que pasar por un proceso riguroso de la SNV y ese proceso es el valor agregado del mercado, lo que da seguridad y protección”, dijo García.
Agregó que todo el ecosistema del mercado está orientado para que el inversionista se sienta cómodo, tranquilo y seguro, independientemente de la inversión que haga.
Tipo de Inversiones
Para entrar al mercado nacional de valores hay dos tipos de instrumentos. El primero es mediante la compra de instrumentos de renta fija, que no es otra cosa que prestarle dinero a una compañía, comprando papeles comerciales de la empresa que escoja, o de su preferencia, en la casa de bolsa de su confianza.
Explicó que cualquier inversionista con una inversión mínima de $20 o más puede comprar papeles en una de las compañías, y eso equivale a prestarle a la empresa esos $20.
La otra variante es que el inversionista puede acudir a la casa de bolsa de su preferencia y comprar acciones de las empresas que cotizan allí, con lo cual se pasa a ser accionista de las empresas, por ejemplo, puede comprar acciones del Banco Nacional de Crédito, Telares Palo Grande, Ron Santa Teresa, Banco de Venezuela, etc. Puede comprar acciones y participar de las ganancias de las mismas.
“Lo interesante en estos casos y desde Invercapital casa de bolsa, que es la que represento, hemos tratado de hacer más accesible el mercado a los inversionistas en el monto de participación, por ejemplo, el monto de la acción del Banco de Venezuela está en 4,50 bolívares, las del BNC, cuesta 0,0020 bolívares, en este caso hay que comprar lotes de 100 para que tenga sentido”.
El mercado está abierto a cualquier tamaño de inversión, lo importante es que la persona que se sienta atraída a iniciar su camino de inversión esté dispuesta a dar el primer paso, que es acudir a la casa de cambio de su preferencia e iniciar el proceso de entender cuáles son sus perspectivas, sus posibilidades y su tolerancia de riesgo.
García explicó que, dependiendo del instrumento de compra hay mayor o menor nivel de riesgo, “no estamos exentos de riesgo, porque no son inversiones 100% seguras, hay una gama amplia de riesgo, la ortodoxia financiera dice que a mayor riesgo mayor rendimiento. Si hay la posibilidad de invertir dinero en una inversión no tan conservadora, se puede tener un rendimiento más alto”, dijo.
Señaló que en relación a la moneda utilizada para las transacciones “en el caso de las casas de bolsa que están bajo la supervisión de la Superintendencia Nacional de Valores, nos circunscribimos al mercado de valores venezolano. Hay dos grandes grupos hoy, bolívares puros y bolívares referenciados al dólar, hay inversiones que se pueden hacer en bolívares y hay instrumentos donde se ata el rendimiento al dólar y encima de ganarse el rendimiento en dólares tiene esa protección, porque siempre los bolívares se van ajustando al tipo de cambio.”
Es un buen momento para invertir.
Para García, siempre es un buen momento para invertir en el mercado de valores, aquí lo importante es que la persona esté clara en su objetivo, consciente de su inversión y esté clara también de su perfil de riesgo.
“Si una persona quiere iniciar un camino hacia la independencia financiera, hacia fomentar la inversión, participar y ver cómo su inversión va avanzando en la participación en alguna de las empresas venezolanas a través de la bolsa de valores, lo primero que tiene que hacer es acercarse a la casa de bolsa de su confianza, donde se le aclaran sus objetivos, sus posibilidades, allí verá todo el panorama, porque la casa de bolsa está en la capacidad de ponerlo en el camino de inversión más adecuado para cada persona”, dijo.
Democratización del mercado de valores
Para el director ejecutivo de Invercapital, la Superintendencia Nacional de Valores ha hecho un gran trabajo en crear oportunidades de inversión en el mercado bursátil. Señaló que el gobierno ha hecho bien en abrir el mercado a los pequeños ahorristas, como una forma de democratizar el mercado de valores, donde hasta el pequeño ahorrista pueda participar.
Sin embargo, “hay dos factores que a veces frenan al inversionista, primero es el mito de decir “tengo que tener mucho dinero para invertir en la bolsa”. Pero hoy en día las personas pueden invertir con un mínimo de 20 dólares, se pueden comprar papeles comerciales, y con una inversión mínima se pueden comprar acciones del Banco de Venezuela, etc.
El segundo, es el temor de enfrentarse a un proceso complicado con muchos requisitos, pero la Superintendencia Nacional de valores ha sido muy diligente en minimizar los requisitos, y una persona con su Cédula de Identidad y el Rif, puede iniciar el proceso de inversión en la casa de bolsa.
García aseguró que, para la Casa de Bolsa que representa, la democratización del mercado de valores es uno de sus focos principales, considerándola “una oportunidad para que los pequeños ahorristas participen directamente del crecimiento económico venezolano”.
La democratización permite a las empresas acceder a financiamientos de cuantía interesante, mientras que el pequeño inversionista tiene entrada a oportunidades de inversión que usualmente no son accesibles.